Palencia impulsa su condición de km 0 del camino lebaniego

Palencia impulsa su condición de km 0 del camino lebaniego


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El Ayuntamiento presentó ayer la señalética Palencia, kilómetro 0 del Camino Lebaniego Castellano, que tiene por objeto indicar al peregrino el recorrido a seguir hasta la dársena desde la


catedral. Es en la plaza de la Inmaculada donde se ubica una loseta con la imagen de la cruz lebaniega enmarcada en el corazón del Cristo del Otero, que «quiere remarcar la conexión entre


Liébana, con la cruz representativa del Lignum Crucis, y Palencia con el corazón del emblema turístico de la ciudad, a cuyos pies se rememora cada año la romería de Santo Toribio, cuyos


restos descansan en el monasterio cántabro, y que desde el cerro acoge a ciudadanos y visitantes», expuso el concejal de Identidad Cultural, Francisco Fernández. «Turismo es una palabra muy


moderna, pero toda la vida ha habido ese tránsito de personas que en un recorrido espiritual buscaban otros contextos», señaló el edil, quien añadió que en la Concejalía se consideró


«bonito»  hacer ese punto de partida en la catedral -aunque el Camino arranca en el Canal- y conseguir que ese turismo espiritual visite la seo, pase por el Museo del Cordón hasta la dársena


y el Museo del Agua siguiendo las losetas, talladas con la cruz que simboliza el Camino Lebaniego Castellano y la flecha direccional, que marcan el itinerario». Acompañaron  al Ayuntamiento


en la inauguración de la señalética representantes de la Diputación, la diócesis y la Oficina de Atención al Peregrino del monasterio de Santo Toribio de Liébana.   «La conjunción de


entidades trabajando en equipo iba a dar un resultado magnífico, que es este», subrayó Fernández.  privilegiado. La alcaldesa, Miriam Andrés, recalcó que no puede haber km 0 más privilegiado


que enfrente del monumento por excelencia, que atrae el mayor número de turistas a la provincia, la catedral, y que supone un valor añadido recíproco».  «Lo que mejor se conoce mejor se


vende» y la plaza de la Inmaculada «no puede acoger mejor piedra que esta del km 0 del Camino Lebaniego Castellano», aseveró. La presidenta de la Diputación, Ángeles Armisén, recordó que la


institución provincial realizó hace  ocho años un mapa del Camino Lebaniego Castellano, que recorre gran parte de los recursos turísticos, naturales y patrimoniales de la provincia. «Once


etapas que se pueden recorrer a pie o en bicicleta», señaló. También incidió en el compromiso de la institución, que «se ha hermanado con Liébana y está trabajando con la Comunidad de


Cantabria para promocionar el Camino Lebaniego», y es que «pertenecemos a ese club de caminos jubilares que permite decir que estamos junto a Jerusalén, Roma, Santiago de Compostela o


Caravaca de la Cruz, lugares que son destinos de peregrinación». El obispo, Mikel Garciandía, hizo hincapié en que la historia palentina no se entiende en los últimos 1.500 años sin la


presencia de la reliquia de la Cruz, traída por Toribio de Astorga; y destacó de los últimos 500 años la presencia constatada en los archivos catedralicios del Camino Lebaniego Castellano,


al que «tanto mimaron los obispos y la diócesis a lo largo de la historia a través de toda la zona de La Pernía, que era la que cuidaba Liébana». Asimismo, invitó a «ensanchar la mirada» y a


considerar que Palencia  «se va situando donde realmente ha estado siempre, un hito fundamental en la historia de nuestra sociedad y nuestra Iglesia». Además, auguró que «el Camino


Lebaniego en los dos próximos años irá creciendo»,  gracias al  Año Compostelano y el Lebaniego en 2028. Finalmente, alentó a trabajar todos juntos,  y es que «se está haciendo mucho, pero


queda por hacer». La responsable de la Oficina de  Atención al Peregrino y guía del monasterio de Santo Toribio de Liéna, Margarita Pereda se refirió a «una historia que se escribe con


mayúsculas que tiene un camino inigualable». «El problema -añadió- va a ser que la gente según lo vaya conociendo y vaya haciendo el boca a boca, lo hará cada vez  más transitado. Tiembla


Santiago». hito. Dadas las dimensiones de la plaza de la Inmaculada y a fin de destacar que este punto es el inicio del Camino Lebaniego Castellano, se ha instalado un hito en piedra de 170


cm de altura por 50 cm de ancho. En uno de los entrantes finales del pretil del puente Mayor, un tótem de 90 cm de alto por 50 cm de ancho  busca provocar la parada del peregrino para que


disfrute en ese punto de las vistas del río Carrión. Dada la existencia en el lateral del Museo del Agua de una estructura metálica de gran tamaño dividida en tres cuerpos, una lona (con


código qr) persigue afianzar la sensación de hospitalidad y acogida de la ciudad de Palencia y que se despierte en él el deseo de volver.